Me queda en el corazón ese sentimiento encontrado de alivio, porque han sido muchos viajes en poco tiempo, y tristeza, por dejar de ver a un montón de gente maravillosa. Ha sido una experiencia gratificante al cien por cien. Hemos trabajado a tope pero también hemos charlado, comido, bebido y reído. Como debe ser. O sea, nos hemos conocido.
Sobre el trabajo que hemos hecho, este domingo publicaremos los dos un artículo en las páginas de ÚH hablando de ello. Para no romper la ‘exclusiva’, jeje, todavía no lo dejo aquí. A ver si el domingo, ya de regreso en Pamplona, lo cuelgo en este rinconcito (pero no es gran cosa, que nadie se emocione).
Como cierre de este capítulo de consultoría, el jueves nos encerramos con todo el staff del periódico en un salón de hotel, desde las 7:30 de la mañana y hasta las 16:00 (que se dice pronto) para repasar a fondo lo mejor y lo mejorable. Sesión agotadora pero muy productiva. Os dejo con la foto que nos hicimos al final (falta algún asistente, pero son todos los que están).
No hay comentarios:
Publicar un comentario