domingo, 18 de marzo de 2007

Queridas niñas:

Ahora mismo no recuerdo si os llegué a dar las gracias lo suficiente, como bien merecíais, por aquellos entrañables dibujos que me regalábais en tal día como el de mañana de cuando vuestros tiempos de... guardería. Todavía me emociono al verlos. Se me saltan las lágrimas. Echo el moco. Es más: los saco a contemplar cada Día del Padre, año tras año, año tras año, año tras año, para emocionarme al recordar esos tiempos remotos en los que tanto me queríais. Sí, ya sé que ahora también, y sé que cuando erais estudiantes no teníais dinero, y que ahora que estáis forradas no tenéis tiempo.
No pasa nada. Mañana volveré a sacar los dibujos y emocionarme. Un beso de éste vuestro padre, que como siempre sólo espera de vosotras el cariño que me dais con tanta generosidad.
Os quiere,
Mambrú

8 comentarios:

Anónimo dijo...

Mi amiga Pedia, Wiki Pedia, me comentó un día que la Ley General de Publicidad de 1988 incluye la publicidad subliminal dentro de los distintos tipos de publicidad ilícita definiéndola como:

"... aquella que por ser emitida con estímulos en el umbral de la sensibilidad no es conscientemente percibida".

Pues eso. Mambrú a la cárcel. Pero no llores. Recibirás entre rejas los dibujos de tus hijas, que siguen dibujando con tanta gracia como en la guardería y que te quieren estés en la guerra o entre rejas. No como las del Cachuli. Cómo reniegan de progenitor las tías.

Porque es un papi excelenteeeee...

Paco Sancho dijo...

No es subliminal, por muchas razones. Entre otras, porque no sé a qué te refieres y, sobre todo, sobre todo, no sé qué quiere decir lo de sublieso.

En Paco Ads, joer, me dijeron que dejara un hueco para que un tal Gúguel metiera algo.

Anónimo dijo...

Nos merecemos también un scan de esas conmovedoras felicitaciones de tus niñas hechas, seguramente, de celofán y cartulinas, en las que se solían poner cosas tipo: "Te dibujo un coche, espero que te guste. Cuando sea mayor y tenga dinero, te lo compraré para el Día del Padre". Obviamente, no sabíamos aún sobre sueldos basura, hipotecas,etc... :-)

Anónimo dijo...

No me extraña que se te salten las lágrimas, se me saltan a mí al leerlo!! Mi padre, aunque también tenía dibujos míos, creo que nunca dejó de fumar por la cantidad de ceniceros y mecheros que le regalé...
De todas formas, conociendo a Paulita, que es mi amiga del alma, una persona adorablemente encantadora de la que siempre aprendo cosas, con lo generosa que es, no comprendo cómo no te regaló nunca ese crucero, por ejemplo, quizás está esperando a poder hacerlo contigo!! Jajaja
Conociendo a mi amiga, es muy fácil imaginar cómo sois el resto de la familia. Un fuerte abrazo, Anabel.

Paco Sancho dijo...

Anabel: después de leerte, lo tengo claro: si cae el crucero... ¡te vienes con nosotros! Beso.

Sincopado dijo...

Paco, vayamos a lo importante: ¿te han regalado algo de lo que, de manera tan disimulada, aparece en el gif?

Anónimo dijo...

Nunca pensé en las consecuencias que los No regalos del dia del Padre iban a tener en mi vida...hasta que vi la luz del descansillo en pijama, o vi la luz de las farolas de la calle en el balcón...La culpa la tiene Su madre: Berta, Paula, mirad a ver que pasa que vuestra madre ha tirado mil duros por el pasillo..y claro, no hay mil duros, no hay regalo, te queremos aita.

Paco Sancho dijo...

Sinco, ya ves que lo de siempre: su amorcito. (Detrás de 'anónimo' se esconde una mujer tan grande, por lo menos, como el cañón que lleva su nombre).