viernes, 17 de agosto de 2007

Escalar

El tipo de la guía dice que si nos quedan fuerzas podemos completar la jornada con la subida al Pic des Moines (2.349 metros). Lo dice porque en esa tesitura nos encontramos al llegar al Collado del mismo nombre (2.162), después de tres horas y media de subibajas (más subi que bajas) por toda la cresta fronteriza hispanofrancesa.

Pero es una excursión fantástica; algo rompepiernas, pero cuál no. Sólo por las vistas al Parque Nacional francés –presidido por el omnipresente Midi d’Osseau–, a todo el Valle de Astún, a la estación de Candanchú y su cadena montañosa donde manda el Aspe, a los ibones de Escalar y de Truchas… merece la pena.

Sombras y luces: paraíso por los cuatro costados en apenas un tictac.
Para los que quieran y no sepan, no tiene pérdida: el crucero lo iniciamos desde la estación de Astún (1.700), ascendiendo hacia el norte por un camino que nace donde el telesilla de Truchas. Después de un par de lazadas –como dicen los profesionales–, el camino desaparece justo donde un depósito de agua, pero se sigue hacia arriba por un sendero bien marcado por las laderas llamadas Los Llanos del Sol. Tras un ratito (ratito aquí, junto al ordenata, porque allá es un ratazo…) se alcanza una pared de zigzag que, superada, nos deja –sin aliento– en el ibón de Escalar (2.078). Desde allí, hacia el noreste, alcanzamos sin esfuerzo el ibón de Truchas (donde termina el telesilla) y algo después el Collado de Astún (2.180), lugar en que se descubre la vertiente gala de los Pirineos, con su majestad el Midi. Ahora se trata de crestear de este a oeste durante una hora hasta el Col des Moines, donde nace el pico del susodicho guía.

Y a fe que lo intenté, casi hasta la cumbre, pero la última lazada era literalmente de vértigo –subida a cuatro patas– y aquí el machote se rajó; no era una problema de fuerzas, por otro lado justas, sino de canguelo vertigoide: fotos y para abajo, escarabajo, mientras por fin entiendo lo de que los frailes le den nombre a collado y pico: fortaleza franciscana se necesita para la escalada.

Me he tropezado con tropecientos terneros y una treintena de caballos, manejados y controlados todos ellos con indescriptible maestría por un solo perro pastor que debía ser de los frailes: sabía latín.

Como casi siempre, os dejamos algunas fotos en Flickr.

4 comentarios:

Claudio dijo...

He estado una semanita en Benasque con los críos, y recomiendo una de Pirineos a todo el mundo. Que montes, que aire, que necesidad de libertad se sacia en estas montañas.

Gracias por el post

Sonríe dijo...

Me encantan vuestras andanzas y vuestras fotos. Preciosas.
Saludos

Anónimo dijo...

Yo también ando por donde vosotros, pero el tiempo está siendo asquerosito, jo. ¿Vosotros os atreveis a "andanzas" con mal tiempo?
Por cierto, me encantan las fotos y esta de Astún no la he hecho así que si hay buen tiempo me animaré, si es que se anima mi "socio perezoso", jeje.

Paco Sancho dijo...

Gracias por vuestros comentarios. La verdad es que el tiempo ha sido malo y hemos podido andar mucho menos que anteriores agostos. A ver septiembre, si con escapaditas...